«¿Cómo llamar a mi empresa?»
Probablemente esta sea una pregunta que te ha generado más de un dolor de cabeza. Existen un montón de posibilidades, elegir un nombre puede parecer algo fácil si no lo has experimentado de primera, pero este simple proceso puede volverse una pesadilla en el proceso.
Antes de elegir cualquier nombre para tu empresa, es de suma importancia tener las ideas claras de a lo que se va a dedicar y los conceptos que se busca comunicar. El nombre que vayas a elegir debe ser acorde a toda la planificación previa del servicio o producto que buscará ofrecer tu empresa. Es muy importante tener claro lo dicho anteriormente, pues estos conceptos o propuesta de valor que buscarás comunicar con tu negocio se verán reflejados en el nombre que elegirás, todo debe funcionar como un conjunto que comunique y no ser entes aislados.
Entonces lo que necesitas antes de dedicarte a buscar un nombre para tu empresa, negocio o emprendimiento es:
- El rubro de tu negocio.
- Lo que ofreces.
- Qué conceptos buscas comunicar con tu marca.
- Qué valores entrega tu servicio.
- Cómo quieres que tus clientes se sientan adquiriendo tu servicio.
- Cómo quieres ser visto por tus clientes y el resto.
- Define los objetivos que quieres alcanzar (Misión y Visión).
- Qué te hace diferente a otras empresas del miso rubro.
Otra cosa que se puede hacer es analizar la competencia para reconocer el área en la cual vas a entrar, esto te ayudará a ver que cosas puedes rescatar de los demás y en que cosas puede que estén fallando para evitar caer en lo mismo.
Teniendo esas bases claras, ya tendrás las ideas generales y específicas para poder buscar un nombre para tu marca. Con aquella información en mano podrás buscar algún nombre que represente todo aquello que deseas comunicar. Puede ser un juego de palabras, nombres de persona, palabras compuestas, algún elemento, etc… Este es el momento de dejar tu mente fluir con diversas alternativas de nombres. Puedes realizar una lluvia de ideas para formar una lista larga, luego ir descartando los que no te convencen y seleccionando los que más te gusten; después podrías elegir individualmente un nombre o pedir opiniones externas con conocidos o haciendo un focus group.
Antes de seleccionar un nombre final, lo que puedes hacer para tener una mejor visión de como funcionaría el nombre, sería colocarlo en diferentes plantillas como un texto, un documento, en un usuario de Instagram, entre otras opciones para ver como suena o luce mejor.
Finalmente debes comprobar la disponibilidad del registro del nombre para tu marca, existen muchas empresas en el mundo y millones de nombres que puede que ya estén ocupados. Por eso hay que tratar de ser originales, verificar previamente si han sido usados y contar con al menos tres opciones en caso de que la primera alternativa no esté disponible.
No te desanimes si no encuentras el nombre ideal de inmediato, tómate un tiempo para pensar, analizar y dejar la creatividad fluir. No te fuerces demasiado, puedes hacer otras actividades que te ayuden a despejar la mente en el proceso, pero no te estreses, ya encontrarás el nombre ideal para tu empresa.